En
Agosto del 2006 abandonamos la cresta NO del pico de los Veteranos. Desde entonces
queríamos volver. En Septiembre del 2008, Amalia nos propuso unirnos a una salida al Veteranos desde las Granjas de Viadós, que tenía previsto hacer con Ana y otros amigos. Ana es una montañera que,
a diferencia de Amalia, camina a un ritmo “normal”. Nos pareció que era una
excelente oportunidad de acabar de una forma tranquila y relajada lo que hace dos años dejamos a medias . Así que nos apuntamos. Las circunstancias hicieron
que la ascensión fuera por derroteros muy distintos a los que habíamos
imaginado…
Tipo Actividad
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Ascensión de alta montaña
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Fecha
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Sábado 27 de Septiembre 2008
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Asistentes
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Las liebres, Amalia, Manel y Teo. Las tortugas, Encarna y Enric.
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Zona
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Alto valle de Gistaín. Pirineo oscense
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Inicio ruta
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Granjas de Viadós. Se llega desde San Juan
de Plan por una larga pista estrecha pero en bastante buen estado.
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Final ruta
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Recorrido
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Granjas de Viadós- Valle de Añes Cruzes (GR11)-Cabaña
de Añes Cruzes (cruce río Añes Cruzes)- Puerto de Gistaín (GR11)-Estanet
Royo-Cresta NO Veteranos-Punta Blanca-Pico Veteranos-Pico de Los Gemelos-
Retorno por el mismo itinerario
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Noche
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Dormimos en el coche, poco antes del final de la pista.
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Horario
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Total
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9 h 35 min
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Efectivo
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8 h 30 min aprox
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Cota (m)
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Mínima
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1720 (Granjas de Viadós)
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Máxima
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3160 (Los Gemelos)
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Climatología
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Nubes y nieblas. Lluvia intermitente. En el
retorno el tiempo mejora
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Nieve-hielo
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Sí. Fina capa de nieve recién caída a partir de 2600 m que nos complicó bastante
la vida.
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Desnivel Acum (m)
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Ascenso
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1570
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Descenso
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1570
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Distancia (Km)
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18.1
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Dific.Física
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Muy alta
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Dific.Orientación
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Baja hasta el Puerto de Gistaín (GR). Después
media. En la cresta la ruta es bastante evidente.
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Dific.Psicológica
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Media-Alta. Cresta algo aérea con tramos estrechos y/o verticales poco difíciles.
La fina capa de nieve hizo que en algunas zonas el ascenso nos pareciera algo
expuesto e impresionante. Sin nieve dificultad Media (debe ser una subida disfrutona y agradable).
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Dific.Técnica
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Media-Alta. Larga trepada que en las condiciones que encontramos puede
acotarse como PD+ (pasos de hasta II+). Sin nieve la cresta es PD-
(dificultad Media).
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Material
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Alta montaña estival. No utilizamos la
cuerda, pero debido a la nieve estuvimos a punto de hacerlo..
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Cartografía
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“Posets-Perdiguero”, 1:25000, Ed.Alpina,2006-2007
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Bibliografía
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“Poset-Perdiguero”, Itins 52 y 53. David Atela. Ed.Sua, 2003
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Valoración
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Larga ascensión, bonita, interesante y con gran ambiente, a dos
tresmiles poco visitados que, si hay nieve, se complica bastante. Grandes
vistas.
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Comentarios
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Atención a los cambios de tiempo. En la
cresta (que no se puede abandonar) una tormenta puede ser temible.
Si hay nieve, aunque sea poca, la trepada
se complica. Salvo que se esté preparado o busquen emociones intensas,
aconsejamos realizar la ascensión con tiempo estable y terreno seco. Lo
pasaremos mucho mejor…
Sin nieve, buen tiempo y con la debida preparación
física y técnica, aconsejamos prolongar la ascensión hasta el Posets. Desde
el pico de Los Gemelos, bajar a la brecha Carrivé (mejor rapel) y remontar la
arista N del Posets (atención a los 100 m sobre la brecha, terreno
descompuesto, vertical y delicado, PD+ ; después cresta de I+ hasta la cima).
El retorno a Viados puede hacerse por la ruta que pasa por la Cabaña del Clot
(debe destreparse parte de la cresta N) o mejor bajar por la vía normal y, después de la Canal Fonda, flanquear en
busca del Ibón de Llardaneta. Desde ahí seguir el GR 11.2 que, tras subir al collado
de Eriste (200 m de ascenso), desciende a Viadós por parajes de gran belleza.
Una travesía fantástica…
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Con perros…
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Ni se os ocurra…
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Track (en formato gpx):
Debido a un problema del GPS, empezamos a registrar
el track en la cabaña de Añes Cruzes
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El desnivel y la distancia se obtienen a partir del track con
Garmin BaseCamp
La estimación de la dificultad se realiza considerando la
actividad como excursión/ascensión y no como escalada.
Si la actividad comporta
escalda u otra disciplina técnica, se indica específicamente
Crónica de la actividad
Viernes
26 de Septiembre 2008.
A las 16.30 h partimos de Begues rumbo al valle de Gistain. El viaje es largo y
algo pasado por agua. La última parte transcurre de noche y por una larga pista
en bastante buen estado. Poco antes del final de la misma aparco en una
explanada situada a la izquierda, intentando dejar el coche lo mas horizontal
posible. Hoy vamos a dormir en su interior y la nivelación es algo fundamental…
En
medio de la oscuridad alguien se acerca. Con voz grave nos dice que ahí no se
puede dormir, y nos pide la documentación... Tras un momento de desconcierto
reconocemos la voz y saludamos a Teo, el amigo ochomilista de Amalia, con el
que estuvimos hace dos semanas en Laspaules. También ha venido para unirse a la
comitiva del Veteranos. Nos explica que Amalia y Manel están cenando en el
refugio de Viadós. El resto de gente aún no han llegado. Tras quedar en vernos
mas tarde, Teo marcha a su furgoneta y
nos dedicamos a preparar el habitáculo del coche. Finalizadas las tareas de
“interiorismo”, sacamos las sillas, la mesa plegable y nos obsequiamos con una
cena a base de ensalada, embutido y tortilla “made in Encarna”, todo regado con
la bota de vino… Amalia llega para el café, que tomamos en la furgo de Teo. Hablamos de lo que haremos mañana. Los pronósticos del
tiempo son variados. Pero la noche fría y estrellada hace pensar que el
tiempo será espléndido.
Cuesta ponernos de acuerdo en la hora de salida. Nuestros amigos me
miran con terror cuando propongo las 6.00 h. “Pero si a esas horas aún no han
puesto las montañas”, me dice Teo… Rebajo mi propuesta a las 7.00 h.
Pero sigue siendo pronto. Amalia dice que Ana y el resto del grupo (que ya están
en el refugio) hablan de las 8.00 h. Finalmente
optamos por empezaremos las 7.30 h… En ningún momento se discute
donde iremos. Siguiendo con el plan previsto intentaremos el pico de los Veteranos y,
si es posible su vecino, Los Gemelos. A las 22.30 h nos despedimos y vamos a
dormir en nuestra “tienda” sobre ruedas. En el cielo oscuro y sin luna lucen
infinidad de estrellas…
Sábado
27 de Septiembre. Me
despierto a las 2.00 h mañana con un ruido sordo. Tardo unos segundos en
comprender lo que ocurre. Me parece tan increíble que abro la puerta del coche
para comprobarlo. Una ola de frío, humedad y desencanto me abofetea la cara y
el alma. Esta lloviendo… Vuelvo a meterme en el saco. Cuando a las 6.00 h de la mañana suena la alarma
del reloj (que olvidé desconectar) la situación no ha cambiado. Permanezco
despierto durante tres cuartos de hora, oyendo el rítmico repicar de la lluvia.
En otra situación me resultaría agradable y relajante. Hoy es frustrante
e inoportuno…
De
haber ido solos habríamos continuado en los sacos. Pero al haber quedado no
tenemos mas remedio que levantarnos, recoger los trastos y desayunar bajo la
lluvia. Después vamos hasta el cruce de la pista con la senda que va al cercano
refugio de Viadós. Ahi encontrarnos a Teo y Amalia. Funda para la mochila,
pantalones, chupa de gore… Todos vamos protegidos contra la fina cortina de agua que
cae suave pero constantemente.
A
las 7.45 h aparece Manel. Por fin conocemos al autor de muchas de las guías que
hay en las estanterías de casa. Manel es un “bicho” que no sabe estar quieto y
mucho menos callado… En cinco minutos escasos hace un análisis pormenorizado
del tiempo, nos habla de las Granjas de Viadós y relata su anterior, y hasta ahora única, ascensión al
pico Veteranos. Después, viendo que el grupo de Ana no aparece, se acerca “en cuatro zancadas”
(como dice él) al refugio para ver que ocurre. Vuelve diez minutos mas tarde y
nos dice que si el tiempo mejora saldrán mas tarde. Ante esta situación Manel
propone hacer por nuestra cuenta y seguir el GR hasta el Puerto de Gistain. Una
vez allí ya veremos lo que hacemos… Todos estamos de acuerdo. Pero no lo vemos
demasiado claro. Nosotros dos con Teo, Amalia y Manel... Tres liebres y dos
tortugas. ¡Que no nos pase nada! Mis esperanzas de hacer una excursión
tranquila y relajada se van al garete…
A
las 8.20 empezamos a caminar (1720 m). Desde los primeros metros las “liebres”
nos toman ventaja. En pocos minutos desaparecen de nuestra vista. Cuando
la niebla y la orografía del terreno lo permiten, los vemos cada vez mas lejos,
marchando a un ritmo salvaje. Nosotros vamos mas despacio, pero tampoco lentos.
Sin detenernos recorremos el cómodo y marcado camino que atraviesa media ladera
la orilla norte del valle de Añes Cruzes. El tiempo sigue malo, con lluvia
intermitente. Continuamente miramos hacia arriba, esperando que se abran las
nieblas y podamos ver si ha nevado en la parte alta de las montañas, algo mas
que probable. Pero las nubes se mantienen cerradas, guardando el secreto del
estado de las cumbres. A las 9.30 h llegamos al lugar donde el GR cruza el
torrente de Añes Cruzes (2050 m).
Esperábamos
encontrar a nuestros amigos. Pero no hay nadie. Frío, niebla, algo de viento…
El ambiente no es propicio para detenerse. Continuamos remontando las duras
cuestas iniciales del camino que va al Puerto de Gistain. Tras superar 200
metros de desnivel el terreno pierde algo de pendiente y la senda se hace mas
cómoda. Incrementamos la cadencia del paso con la finalidad de hacer mas corta
la espera de los que nos preceden, que a buen seguro deben de haber llegado
al collado. A pesar del tiempo, la subida por la larguísima ladera de hierba y
roquedos nos parece bonita, hasta relajante, algo que no deja de sorprendernos.
¿Nos estaremos convirtiendo en pequeñas liebres?
A
las 10.40 h llegamos al Puerto de Gistain (2577 m). Hace rato que no llueve.
Pero la niebla es espesa. . Aquí tampoco hay nadie. Sorpresa,desconcierto. Se
nos ocurren tres explicaciones. La primera es que hayan seguido subiendo. La
segunda es que se hayan parado en la cabaña de Añes Cruzes, poco antes de
cruzar el torrente, y a causa de la niebla, hayamos pasado de
largo. La tercera es que nos estén esperando mas arriba, en un lugar
mas abrigado de los elementos. Lo único que tenemos claro es que,
independientemente de si nuestros amigos van o no por delante, no hay motivo para darnos la vuelta. Proseguimos la ascensión.
Cuando
el GR empieza a bajar hacia el valle de Estós lo abandonamos para ir hacia el
sur por suaves pendientes herbosas. Con la niebla el terreno es perdedor. Pero
los recuerdos del intento anterior nos permiten seguir la ruta sin problemas.
Enseguida llegamos al pie de la ladera roco-pedregosa que defiende el acceso al
circo del Ibon Royo (10.50 h, 2580m). Una traza de senda señalizada con hitos
remonta la pendiente con algunas lazadas. A media subida empezamos a encontrar
una fina capa de nieve en la que hay huellas recientes. Unas grandes (Teo y
Manel). Otras pequeñas (Amalia). Las liebres van por delante…
A
medida que ganamos altura las nieblas se abren. Aparecen retazos de cielo azul
entre los que se cuelan los rayos de sol. La temperatura se hace mas agradable.
Llovizna de cuando en cuando. Tras 25 minutos de subida llegamos al borde
superior del escalón (11.27 h, 2760 m). Delante nuestro (S-SO) tenemos el
pequeño Ibonet Royo y el circo formado por el cordal del pico Royo a la
izquierda (E), el pico Veteranos y su cresta. La montaña, espolvoreada con la
nieve caída recientemente, presenta un aspecto precioso e inquietante. No son las mejores condiciones para un
itinerario de trepada…
Como
era de esperar aquí tampoco hay nadie. Inspeccionamos la cresta. Localizamos
tres puntitos cerca de lo alto de la primera elevación de la misma. “Nos llevan
media hora de ventaja, tal vez algo mas” le digo a Encarna. Nos detenemos para
almorzar junto el pequeño lago. Mientras comemos seguimos las evoluciones de
nuestros amigos. Con aparente rapidez recorren la parte horizontal de la cresta.
Después se toman mas tiempo para remontar la pirámide de la Punta Blanca que
precede la cima del Veteranos. “Ahí la cosa debe ser mas difícil”, comento
mientras engullo una barrita.
A
las 11.53 h volvemos a la carga. El día ha mejorado sensiblemente. Ya no llueve.
El cielo cada vez está mas azul. Las nieblas siguen barriendo las montañas que
toman un aire enigmático. Hace rato que no vemos a las liebres, por lo que
suponemos que deben haber ido hacia el pico Gemelos. Nos ponemos el casco y dejamos
a mano la cuerda. Remontamos en diagonal la incómoda pendiente de piedra
fina que nos lleva al collado donde empieza la cresta N-NO del Veteranos que,
envuelta en un fina niebla, tiene un aspecto fantasmagórico (12.06 h, 2878 m).
Tras
un breve alto para tomar aire y ánimos, iniciamos el ascenso por un terreno
fácil que se empina progresivamente. Poco antes del inicio de las
dificultades dejamos los bastones entre unas piedras (12.11 h, 2910 m). Remontamos
unos metros entre bloques de roca y alcanzamos una repisa al pie de un murito casi vertical. Nos encontramos en el punto donde nos retiramos hace dos años.
Entonces subí en diagonal por las placas calcáreas y lisas de la izquierda.
Había pocas presas, tenía mucho aire bajo mis pies y lo pasé mal subiendo y
bajando por este pasaje. Después vino la histeria colectiva. Mi acojono se
contagió al resto del grupo, y decidimos bajar… Hoy las circunstancias son
mucho peores. La roca está nevada o mojada, hace frío, estamos
solos... Pero la moral es mucho mas alta…
Con
cuidado atacamos la pared que tenemos delante. El terreno casi vertical y los
apoyos (regletas y pequeñas fisuras) mal colocados dan poca confianza. Objetivamente
el paso no supera el II grado. Su dificultad es mas psicológica que real, algo
que en adelante será una constante. Detrás de mí Encarna trepa en silencio. La
veo dudar y me mira con cara de circunstancias. No lo ve claro... Pero sube
estupendamente.
Dejamos
atrás el murito. Mas arriba el terreno se tumba y, aunque sigue estando algo nevado, subimos
mas fácilmente hasta una primera elevación. A continuación toca atravesar un
estrecho y aéreo tramo de arista horizontal de una quincena de metros (I+). Después
nos enfrentamos a un resalte casi vertical de roca esquistosa y bastante
nevada. El paso (II) es muy aéreo e impresiona un poco. Lo superamos sin
grandes problemas por el mismo filo de la cresta (donde esta casi seco).
Mas
arriba la arista pierde progresivamente inclinación. No tardamos en alcanzar
una punta donde la cresta gira a la izquierda (S-E) y se hace horizontal (12.57
h, 3040 m). En contra de lo que parece desde abajo, este tramo es fácil.
Durante unos de 200 metros de distancia, rastros de senda nos permiten recorrer
la cresta por la derecha, esquivando algunos escarpes. Rápidamente alcanzamos una
brecha situada al pie de la pared de la Punta Blanca. La subida de este muro es
la parte mas delicada de la ascensión. Pequeñas canales, travesías por placas
rocosas cubiertas de una fina capa de nieve que oculta los apoyos y los hacen
resbaladizos, muretes de roca mojada o nevada… Todo en un ambiente aéreo y de
lo mas distraído.
Poco
a poco, las dos tortugas buscan los mejores pasos. Nadie sufre. Subimos lentamente, con seguridad. De
cuando en cuando una sombra de duda recorre la mente al pensar en la bajada, que
habremos de hacer por el mismo sitio. Si no lo vemos claro habremos de echar
mano de la cuerda...
A
las 13.05 h alcanzamos la cima de la Punta Blanca (3114 m). Por fin nos encontramos
con Teo, Amalia y Manel que van de bajada. Sorprendidos de vernos, intentan
explicarnos porque no nos han esperado. Que hacia frío, que querían asegurar la
cima, que iban haciendo sin darse cuenta… La verdad es que nos es igual. Lo
importante es que estamos aquí, con la cresta hecha y la cumbre del Veteranos casi
en el bolsillo. Manel nos cuenta que la nieve les ha complicado mucho la
subida, que en algunos tramos la han encontrado delicada y arriesgada. También
nos dice que desde Viadós han tardado 3h 50 min. Le respondo que ahora entiendo
los horarios de sus guías… Nos despedimos con la promesa de encontrarnos en el
collado. Pero estamos seguros de que no volveremos a verles el pelo hasta que
lleguemos a Viados. Buenas son las liebres…
Una bajada corta
y fácil a una brecha y una subida por rocas rotas, aún mas sencilla, nos
lleva a la cumbre del pico Veteranos (13.27 h, 3125 m). Descontando las paradas
hemos tardado unas 4h 30 min. Un horario meritorio para dos tortugas como
nosotros, mas teniendo en cuenta las condiciones en que estaba la cresta. Rebosamos
satisfacción por cada poro de nuestro cuerpo.
Las vistas son bastante limitadas. Nos hemos de contentar con los
Gemelos, el Posets, el Bardamina y su cresta, la Aguja de la Paul, un tramo del
valle de Estos y poco mas…
Cinco
minutos después nos vamos al pico de los Gemelos. Los rastros de una senda que baja por
la vertiente oeste, muy cercana a la cresta sur del Veteranos, facilitan la
primera parte del descenso de la misma, que en su parte inferior presenta
algunos pasos de trepada. Llegados al
collado que separa los dos picos (13.44 h, 3080 m), iniciamos un ascenso en
diagonal por la ladera oeste de Los Gemelos. Es un terreno empinado e inestable,
con tramos pedregosos y pequeños muros, que si no fuera por una tenue huella de
paso sería duro de subir. También encontramos algunas zonas de nieve, que
no suponen ningún problema. El último tramo lo hacemos por una cresta estrecha
y aérea, pero muy fácil. Nos lleva hasta las dos pequeñas cumbres, separados
pocos metros por una depresión mínima
(13.59 h, 3160 m).
Aparte de la
cima en sí, lo mas destacable del pico de Los Gemelos es la impresionante vista del
Posets y su arista norte, que tenemos justo delante. La ruta que lleva a la
misma a través de la tan famosa Brecha Carrivé (un profundo tajo del que no
logramos ver el fondo) presenta un aspecto duro y comprometido (que no difícil),
no tanto por la bajada (que se soluciona con uno o dos rapels) sino por los 100
metros de pared vertical que hay que remontar desde la brecha (según las guías PD+).
Tras
permanecer diez minutos en la cumbre iniciamos la vuelta. Con alguna pequeña
embarcada llegamos a la cumbre del Veteranos (14.35 h). En el collado donde
empieza la cresta vemos un grupo de gente. Deben ser Ana y sus amigos. Un breve
alto e iniciamos el temido descenso (14.40 h). Parte de la nieve se ha fundido
y lo encontramos mas fácil que la subida. En la bajada de la Punta Blanca aún
queda nieve. Apoyando el culo salvamos algun paso comprometido. Mas abajo, en
el descenso de la primera punta de la cresta, nuestro avance se vuelve lento y
cuidadoso al destrepar el resalte vertical y el tramo estrecho de arista
horizontal. Ahí nos cruzamos con el grupo de Ana que, lentamente, con cuidado y
sin grandes problemas, continúan hacia la cima.
Sólo nos
queda el murito vertical, que es el tramo mas difícil. Despacio, controlando los apoyos,
destrepamos sin grandes complicaciones. Después todo es fácil y rápido. Como
diría Manel, “en cuatro zancadas” llegamos al lugar donde dejamos los bastones
(15.21 h). Continuamos el descenso por el mismo itinerario que a la subida. El
día se va aclarando. Las nieblas se retiran y se amplían las vistas sobre el
valle de Estós, donde podemos ver los picos de Gías, Clarabide, y de la Baque.
También el pico de Gistain (situado justo al norte del collado) y en el cordal
fronterizo los picos de la Madera, Añes Cruzes y Aigües Tortes.
A las 16.00
h llegamos al Puerto de Gistain. Tal como suponíamos aquí no hay nadie…
Proseguimos la bajada. A medio descenso observamos en la enorme ladera pedregosa de la cara sur
del pico de Aigües Tortes una persona que baja en diagonal. Por su indumentaria
diríamos que es Manel, pero el hecho de que vaya solo nos hace dudar. Como
quiera que se dirige al mismo punto que nosotros no tardaremos en aclarar el misterio.
A las 16.45
h llegamos al lugar donde el GR cruza el torrente de Añes Cruzes. Unos minutos
de parada y seguimos adelante. Ahora tenemos claro que el excursionista que
baja solo y a toda leche es Manel. Nos alcanza enseguida. Deseoso de hablar
después de ir un rato en solitario, nos explica que cuando llegaron al collado
de Gistain se separó de Teo y Amalia que continuaron bajando hacia Viados. Era
pronto, el tiempo iba a mejor y no se sentía cansado. Así que decidió completar
el día con una segunda excursión. Ascendió los picos de Gistain, el de la
Madera (donde encontró algún problema en la cresta) y el de Añes Cruzes, bajando al valle por el
Ibón de Añes Cruzes. Sin comentarios… Como buenas tortugas le decimos que vaya
bajando. El prefiere ir con nosotros “para poder descansar…”.
Durante la
hora que sigue hablamos de mil y un temas. Intercambiamos opiniones sobre
recorridos, hablamos de cómo era el montañismo de los “viejos tiempos” (somos
de la misma quinta), de Córcega, de la integral de Sierra Nevada. Manel
nos describe itinerarios que desconocemos y nos invita a salir con él en el
futuro. Cuando le digo que no podemos seguir su ritmo endiablado, nos contesta
que no nos preocupemos. Aprovechará la ocasión para que venga su mujer que también
le da a la montaña. “Cuando voy con ella me pongo detrás y veo como me adelanta
todo el mundo…”, nos dice con un tono algo socarrón. Sonrío y no digo nada…
Con tanta
charla la larga bajada del valle de Añes Cruzes se nos hace corta. A las 17.55
h llegamos al rellano donde tenemos el coche, justo cuando Amalia y Teo se disponen
a comer. Nos invitan a una taza de caldo mientras bromeamos y comentamos la
marcha de la excursión. Reconocen que hoy han ido muy deprisa, en parte porque
ante el tiempo tan inestable que hacía querían asegurar la cima.
A las 18.30
h Manel se despide. Nos quedamos mirando
el cielo y preguntándonos que haremos mañana. Las nubes continúan enganchadas
en las montañas mientras el día declina, dejándonos con dudas sobre el tiempo.
Tras preparar el coche para la noche, a las 20.00 h vamos al refugio para cenar
con Ana y su grupo. Decidimos que mañana haremos algo suave, para descansar las
piernas.
A las 21.30
h nos despedimos y volvemos al coche. La noche es negra, húmeda, sin estrellas.
De nuevo las nubes se han cerrado sobre el valle. Cómodamente instalado en el
interior del coche, empiezo a escribir este relato en el portátil. Pero aguanto
bien poco. El sueño me vence y me voy a dormir. El Veteranos y Los Gemelos ya
forman parte de una bella historia que algún día nos gustaría repetir, pero sin nieve y con buen tiempo....
La ruta en imágenes (Recomendamos ver como como presentación -mas calidad- . Para ello pulsar en la foto y después el botón "pantalla completa")
Usuarios de iPhone o iPad (que no pueden ver presentaciones en Flash) hacer clic en el siguiente link y activar la pestaña "Presentación diapositivas"
https://picasaweb.google.com/112310734743124837080/VeteranosYGemelos20080927?authkey=Gv1sRgCNyc8s_N-PfuEg
EniEn - Juliol 2013
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