Rutas e historias de montaña mas o menos normales, y alguna cosa mas…

jueves, 23 de abril de 2015

TOSSAL DE GALLINOVA Y ROCA DE MONTEGUIDA

RUTA CIRCULAR DESDE ABELLA DE LA CONCA

Siguiendo la tónica de la anterior entrada de este blog, presentamos otra ruta circular en el Prepirineo Leridano. Esta vez nos movemos en el extremo occidental de la Serra de Carreu, en una zona montañosa situada al SO de la Serra de Boumort y al NE de Isona. El recorrido, con origen y final en el pueblo de Abella de la Conca (un lugar sorprendente, muy visitado por los escaladores)   asciende la Roca de Monteguida y el Tossal de Gallinova. En buena parte transcurre por un terreno agreste, mas bien árido y con una soberbia belleza, que pide un poco de moral y espíritu aventurero. Abstenerse aquellos que lo pasan mal si pierden el camino. En esta ruta lo extraño es encontrarlo y poderlo seguir…

La ruta puede dividirse en tres partes. La primera va por antiguos senderos, a menudo borrados por la vegetación, que ponen a prueba nuestra capacidad de orientación. Es un tramo largo, solitario y buena parte en subida. Sus principales dificultades son no perderse en exceso y no desanimarse ante el terreno un tanto “jabalí. Nuestro esfuerzo se verá recompensado al alcanzar la cima de la Roca Monteguida, una cumbre modesta, poco visitada y con grandes vistas.

La segunda parte es de orientación mas fácil. Empieza con la bajada a la collada de Trumfo. Desde la misma se sube al Tossal de Gallinova por una senda bastante decente. Este pico, imponente y muy panorámico, sería una rareza si no se hubiese incluido en listado ampliado de los Cent Cims. Se vuelve a la collada por el mismo itinerario que a la subida.

La tercera parte nos retorna a Abella de la Conca y no tiene ningún problema. Sin prisas se ha de seguir una larga pista en buena parte apta para vehículos (se puede hacer algún atajo). Después de tanto ejercer de exploradores, esta caminata hasta resulta relajante. Con todo, disponiendo de dos coches lo aconsejable es ahorrarse buena parte de la misma…

Hacer esta ruta no nos resultó fácil. Sin contar con las complicaciones de encontrar el camino (algo a lo que estamos habituados) la excursión fue bien hasta la collada de Trumfo. En la subida al Gallinova todo se complicó. Una “mega-pájara” y el intento frustrado de seguir una ruta directa (que requería de una cuerda que no llevábamos para izar a Pot) nos exigieron un gran esfuerzo físico y moral. El descanso cimero fue curativo y durante el resto de la ruta no hubieron mas problemas. La excursión nos costó algo mas de lo que debería, pero estuvo muy bien. Tanto que posiblemente la volvamos a hacer con alguna variante. Esperemos que la experiencia sirva de algo y podamos realizarla en mejores condiciones y con mejor horario ¿Alguien quiere apuntarse…?

En el cordal cresta de la Roca de Monteguida. Al fondo el Tossal de Gallinova
FICHA TECNICA           

Tipo Actividad
Senderismo
Fecha
Sábado 28 de Marzo 2015
Asistentes
Encarna, Enric, Pot
Zona
Prepirineo leridano. Comarca del Pallars Llusà. Verriente oriental de la cuenca de Tremp
Inicio ruta
Abella de la Conca. Zona de aparcamiento poco antes de la entrada del pueblo (910 m). Desde Isona (ctra C1412 de Artesa del Segre a Tremp, PK 41.8) seguir la Ctra L-511 (unos 5 Km) hasta encontrar el inicio de la ctra que lleva a Abella de la Conca (6 Km)
Final ruta
Recorrido
Ver tabla adjunta
Cent Cims  (*)
Tossal de Gallinova
Noche
No
Horario
Total
9 h 15 min
Efectivo
6 h 13 min aprox
Cota (m)
Mínima
910 (Inicio-final ruta)
Máxima
1687 (Tossal de Gallinova)
Climatología
Buen tiempo
Visibilidad
Buena
Nieve-hielo
No
Desnivel Acum (m)
Ascenso
1000
Descenso
1000
Distancia (Km)
13.2
Dificultad global
Alta-Media
Dific.Física
Alta
Dific.Orientación
Media-Alta hasta la collada del Trumfo. Resto baja
Dific.Psicológica
Baja-Media
Dific.Técnica
Baja (caminar)
Material
Senderismo. Mejor con ropa antipinchazos y que se pueda rasgar
Si se sube al Tossal de Gallinova por la vía difícil puede ser útil llevar un cordino (minimo 10 m) cintas y algún mosquetón.
Cartografía
“Serra de Boumort-Oest”, 1:20000, Ed.Piolet,2006
Bibliografía
“La Serra de Boumort i muntanyes veïnes”,M.Cortés,Itin.44,45,Col.Azimut nº70, Ed.Cossetania,2005
Valoración
Ruta senderista circular por parajes solitarios y un tanto áridos de media montaña. Con una primera parte que a menudo requiere buena orientación y una segunda bastante plácida que transcurre por una larga pista. Buenas vistas.
Comentarios
-Una ruta sorprendente en una zona sorprendente, poco conocida y menos visitada.
-Evitar en épocas calurosas
-En la bajada de la Roca Monteguida a la collada del Trumfo es muy importante encontrar el Pas del Manjo (único punto por el que la bajada es fácil).
-El ascenso al Tossal de Gallinova tiene dos rutas. Una sencilla (la que hicimos nosotros) y otra mas difícil (que por problemas físicos y al ir con Pot preferimos abandonar) que al menos presenta un paso de trepada (II-III, 5 m, sin exposición, si hay mas pasos no lo sabemos porque no fuimos mas arriba). Lo mejor debe ser combinarlas, subiendo por la difícil y bajando por la fácil.
Con perros…
-Sin problemas. No hay agua y es una zona algo árida. Llevar agua…
-Si el peludo no está habituado tal vez tengamos que ayudarle en la canal de acceso a la cima de la Roca de Monteguida. Si se sube el Tossal de Gallinova por la vía difícil deberá preverse material para izar al animal.
Track (en formato gpx):
(*)Se indica si la ruta incluye el ascenso a algún pico del listado de Cent-Cims de la FEEC
El desnivel y la distancia se obtienen a partir del track con Garmin BaseCamp
La estimación de la dificultad se realiza considerando la actividad como excursión/ascensión y no como escalada.
Si la actividad comporta escalda u otra disciplina técnica, se indica específicamente

RECORRIDO      

Lugar de la ruta
Altura
 (m)
Distancia
Km
t.parcial
(h:min)
t.acum
  (h:min)
Comentario
Abella de la Conca
910



Pequeño parking poco antes pueblo
Iglesia de Sant Esteve
962
0,4
0:10
0:10

Canal inicial de subida
1008
0,9
0:16
0:26

Collada a media canal
1063
1,2
0:13
0:39
Entre rocas de Magaró y dels Arços
Coll de Juvell
1134
1,6
0:14
0:57

Coll de Cal Perdiu
1137
2,4
0:27
1:24

Inicio cordal del Serrat de Virolla
1404
3,8
1:00
2:24
Seguir el cordal
Roca de Monteguida
1551
4,8
0:46
3:10

Pas del Manjo
1507
5,5
0:15
3:25
Paso clave (importante encontralo)
Collada del Trumfo
1462
5,7
0:08
3:33

Tossal de Gallinova
1687
6,9
0:47
4:20
Cent Cim
Collada del Trumfo
1462
8
0:34
4:54
Bajada por pista
Cruce pistas
1250
9,3
0:18
5:12
Accesible en coche
Casa Sarró
1100
10,8
0:21
5:33

Abella de la Conca
910
13,2
0:40
6:13
Pequeño parking poco antes pueblo

CARTOGRAFIA

CRONICA       

Sábado 28 de Marzo del 2015. En nuestra casa lo de levantarse a las cuatro de la mañana para ir al monte vuelve a ponerse de moda. Mala costumbre… Tras un viaje somnoliento y tranquilo, a las ocho y media pasadas llegamos a Abella de la Conca. Dejamos el coche en una pequeña zona de aparcamiento que hay poco antes de entrar en el pueblo. El tiempo es estable y algo frío, ideal para ir de excursión. Sin prisas preparamos las mochilas, calibramos el GPS, nos miramos el mapa… Una vez listos empezamos a caminar (8.55 h, 910 m). 


Seguimos la carretera y enseguida entramos en el pueblo aun dormido. Abella de la Conca es pequeño, bonito y sorprendente. Situado en una ladera inclinada, bajo la pared del gran contrafuerte rocoso de la Roca del Castell y elevado sobre una profunda garganta que forma el río Abella, sus calles son estrechas y empinadas. Algunas de las casas son ruinosas, pero la mayoría están restauradas. La abundancia y variedad de las paredes rocosas que hay en la zona, hacen que sea muy visitado por los escaladores, que pueden alojarse en el Eco Refugio Abella Climb (https://www.facebook.com/abella.climb/info?tab=page_info).

Callejeando sin prisas nos dirigimos a la parte alta del pueblo. Ahí está la iglesia románica de Sant Esteve (buenas vistas, 9.06 h, 962 m). Un camino carretero que pasa a la derecha del templo nos conduce, poco mas allá, a un pequeño rellano situado junto el cementerio. Seguimos por un sendero (O) que sube unos metros hasta un casa de reciente construcción. Nos detenemos junto a la misma para estudiar la parte inicial de la excursión. Vista desde aquí parece bastante clara. Hemos de remontar una amplia canal que vemos al oeste (mas o menos en la vertical del lugar donde dejamos el coche), que tiene a su izquierda dos grandes rocas, la de Magaró en la parte baja, y la dels Arços en la parte superior. En lo alto de la canal, el Coll Juvell parece cercano. Pero hasta el mismo hay una buena subidita de mas de 200 metros de desnivel.

Dejamos la casa y seguimos, primero una senda, después huellas de paso, que en ligero descenso se dirigen al oeste. No tardamos en alcanzar una vieja pista horizontal que rápidamente nos lleva hasta la canal (9.24 h,1008 m). Un posible sendero balizado con algún que otro hito parece remontar por las lenguas de pedrera del centro de la canal. Lo seguimos. Pronto nos damos cuenta que la piedra suelta hace que sea un mal negocio ir por aquí. Así que nos vamos a la izquierda (S). Ahí damos con un senderillo evidente pero difuso que, señalizado por hitos, remonta con algunas lazadas por la orilla izquierda (S) de la canal. La subida es sostenida, algo incómoda. El camino es de mal seguir y hemos de estar muy atentos. A la mínima la pierdes…

La senda se aleja progresivamente del centro de la canal y nos conduce al collado que separa las roca de Magaró (a la izquierda) de la dels Arços (a la derecha). Son las 9.37 h y el GPS marca unas altura de 1063 m. Hacemos un breve alto. Mirando al sur disfrutamos de una bonita vista del llanura de Isona con el Montsec  de Rubies como telón de fondo. Proseguimos el ascenso por un sendero casi inexistente (algún hito). Vamos al NO, mas o menos cerca a la pared de Roca dels Arços que, iluminada por el sol mañanero, presenta un aspecto imponente. Los hitos nos dirigen demasiado a la derecha, donde la vegetación espesa se apodera del terreno. Pronto el avance queda barrado. Hemos de recular para subir mas a la izquierda, prácticamente bajo la pared. Varios buitres que toman el sol en un relieve del muro rompen a volar y nos sobresaltan. Nos sentimos intrusos… Tras remontar un sector de placas rocosas e inclinadas, un ascenso en diagonal a la derecha por terreno mas despejado nos lleva hasta el amplio Coll Juvell (9.55 h, 1134 m). Nuevo alto. Muchas fotos…

El siguiente sector de la excursión ha de llevarnos hasta el Coll de Cal Perdiu que vemos al oeste, mas o menos a nuestra altura. A la izquierda (S) del mismo, la Roca de Viella presenta una cresta afilada y llamativa que baja hacia el este. Una hondonada amplia pero no muy profunda nos separa del collado. Una ladera de muros rocosos descarta el flanqueo horizontal. Hay que bajar (no mucho) y después subir…

Dejamos el Coll Juvell (10.02 h) para descender campo a través (NO) con un trazado en diagonal mas o menos escalonado, que discurre por una ladera de matorrales, bosquecillos y pequeñas pedreras. La bajada es corta y algo intuitiva. Diez minutos y una cincuentena de metros mas abajo nos situamos por debajo de la ladera de muros rocosos (10.12 h, 1083 m). Ahí nos sorprende encontrar un sendero poco marcado (algún hito) que, ascendiendo suavemente, nos conduce por pedreras y bosquecillos hasta la escotadura amplia y herbosa del Coll de Cal Perdiu (10.32 h, 1137 m). Un grupo de buitres nos observa desde lo alto de la Roca de Viella. Moviendo la cabeza a derecha e izquierda parecen decirse entre ellos “¿De donde salen estos…?”. Hasta ahora hemos encontrado la ruta sin apenas complicaciones. Pero en adelante la cosa se complica…

Un breve alto y reanudamos la caminata (10.37 h). Casi sin subir vamos al NO, flanqueando bajo una vertiente de muretes calcáreos. Tras recorrer unos 200 metros (desde el centro del collado) encontramos el rastro de un viejo camino ahora tomado por la vegetación (Camí del Grau, 10.43 h, 1145 m). El camino, en algún tramo soportado por márgenes de piedra, remonta en lazadas por una canal rocosa poco marcada y alcanza una ladera poco inclinada situada por encima de los muretes calcáreos (10.59 h, 1212 m). Antiguamente esta una zona de cultivos. Ahora está ocupada por una vegetación de matorrales, pequeñas encinas y bosquecillos, que limita la visibilidad y el avance. El camino se pierde definitivamente. Empieza el tramo de mayor dificultad de orientación…

Intentando seguir un sendero que marca el mapa (que no encontramos) vamos a la derecha, primero ascendiendo ligeramente en diagonal (NE), después flanqueando casi en horizontal (E). El terreno es confuso. No vamos por donde queremos, sino por donde nos permite la vegetación. Nuestro avance, siempre a la derecha, es dubitativo, irregular, lento… Tardamos cerca de media hora en recorrer medio kilómetro ascendiendo un centenar de metros de desnivel . Hasta que alcanzamos una canal no demasiado marcada y orientada al N-NE, que se encuentra en la vertical del Coll de Cal Perdiu. El mapa dice que el sendero sube por la orilla derecha (E) de esta canal. Nosotros no lo vemos claro (vegetación muy espesa) y decidimos ir por la izquierda (O). Pero antes nos detenemos para comer, que ya toca (11.31-11.54 h, 1323 m).

La subida es directa y bastante aceptable. Salvo un par de zonas en que la vegetación nos toca un poco la pera, ganamos desnivel con rapidez. Alcanzamos el cordal-cresta del Serrat de Virolla en un sector mas o menos horizontal, orientado al NO y bastante amplio, que por el otro lado (N y NE) queda cortado (12.11 h, 1404 m). Vemos la salida de la canal unos 50 m a nuestra derecha (SE). La llegada al cordal supone una gratificante bofetada visual. Los principales protagonistas del espectáculo son las paredes de la Serra del Serrat de Virolla y del Gallinova (al pie del mismo se adivina mas que ve la collada del Trumfo), la larguísima y estética cresta de la Serra de Carreu , el Bony de Calama, la Serra de Carrànima y los barrancos del Bac y de Abella. Mas alejadas podemos distinguir, aun con nieve, la Serra del Port del Comte y un poco de Pedraforca. Imposible no hacer un alto y tomar fotografías…

Desde que perdimos el Camí del Grau, la excursión ha sido incómoda, complicada, desalentadora. Demasiados ir y venir buscando, no el camino (a eso renunciamos enseguida), sino una ruta de avance entre la vegetación. Si volvemos por aquí (aunque parezca ilógico nos gustaría hacerlo) probaremos a seguir mejor el trazado de la senda que marca el mapa, a ver si así el paso es mejor y mas rápido. Esto comporta flanquear mas a la derecha de lo que lo hicimos, manteniendo un rumbo constante E-NE, hasta alcanzar la canal en la misma zona en la que hoy lo hemos hecho. Después subir por su orilla derecha (E), que vista desde arriba parece ofrecer un buen paso. Por ideas que no quede…

La vista del Serrat de Virolla es un tanto destrempante. Por la izquierda (O) una ladera ocupada por la vegetación y algún relieve rocoso. Por la derecha (E) una vertiente abrupta y muy empinada. Ambas opciones nos dan mala espina. Parece que el vía crucis continua… Pero no será así. Como pronto comprobaremos, a partir de ahora el avance será mucho mas sencillo…

Caminando junto el cortado vamos (NO) hasta el extremo del sector horizontal del cordal. Justo cuando este se alza y enrisca encontramos un senderillo evidente que sale a la derecha y entra en la vertiente oriental (12.16 h, 1418 m). Lo seguimos. La senda atraviesa horizontalmente por debajo de los muros rocosos de la primera punta de la sierra. Después, mas difusa y discontinua, sube en diagonal por una sector de incómodas acanaladuras terrosas. El terreno es muy pendiente, algo aéreo e inestable, pero se pasa sin problemas. La subida nos lleva a doblar un contrafuerte de la montaña. Después la senda (ahora mas marcada) desciende y pasa bajo un tramo horizontal del cordal, antes de continuar flanqueando. En esta zona dejamos el sendero para tomar una huella de paso que, enseguida y sin mas problema que un sencillo y cortísimo paso rocoso, nos deja en el cordal (12.30 h, 1455 m).

Continuamos por el cordal-cresta. Caminamos junto los cortados que se abren a su derecha (E) o unos pocos metros a la izquierda (O). Ganamos altura y nos situamos al pie de las paredes verticales de una torre rocosa. La esquivamos por la izquierda (O, traza de paso), bajando suavemente y después subiendo en diagonal hasta alcanzar de nuevo lo alto del cordal-cresta, por el que seguimos siempre a ras de los cortados. Delante y mas arriba tenemos una nueva elevación amplía e inclinada a la izquierda, cuyo acceso esta defendido por un cinturón rocoso. Es la Roca de Monteguida.

En unos minutos llegamos al pie de los muros. Dejamos el cordal-cresta para ascender, a la izquierda y algo en diagonal, hasta la base de la primera canal con árboles que corta la pared en toda su altura. Vista de lejos parece fiera, pero una vez al pie de la misma vemos que se puede subir (12.51 h, 1519 m). La primera parte es muy fácil. Mas arriba se estrecha y ,a veces, hay que apoyar las manos. A dos terceras partes de la canal encontramos un paso que por la izquierda exige superar un murete de un par de metros casi imposible para Pot (tendríamos que izarlo). Por suerte puede evitarse por la derecha, peleándonos un poco con la vegetación. Mas fácilmente de lo que pensábamos alcanzamos la salida de la canal, que tiene unos 20 m de altura (13.01 h, 1541 m). Continuamos subiendo junto el borde de los cortados. Enseguida llegamos a un pequeño hito de piedras que señala el punto mas alto de la amplísima cumbre de la Roca de Monteguida  (13.03 h, 1551 m). Primer objetivo del día (y el mas difícil) conseguido. Ahora toca parar, descansar y disfrutar de las panorámicas…

Con importantes paredes hacia el este, esta montaña es un gran mirador que abarca desde la Serra del Montsec a los Pirineos. Pero lo que mas nos llama la atención son las vistas cercanas. El Tossal de Gallinova y dos magníficas sierras que visitamos hace tiempo. La de Carreu (http://relatosenien.blogspot.com.es/2011/02/el-filo-de-los-buitres.html) y la de la Pessonada (http://relatosenien.blogspot.com.es/2012/05/els-cingles-de-pessonada.html).

Hasta ahora, la excursión ha sido bastante mas lenta de lo que esperábamos. Contando paradas, microparadas y enmierdadas (de estas dos últimas han habido unas cuantas) hemos tardado mas de 4 h en llegar hasta aquí. Preveíamos unas 3 h…La parte positiva es que no me siento demasiado cansado. Pero el cuerpo me engaña…

Tras un cuarto de hora de parada (13.18 h) reanudamos la caminata. Bajamos al norte, junto los cortados, hasta alcanzar una amplia depresión que separa las dos cimas de la montaña. Entonces nos apartamos de las paredes para ir al N-NO, cruzando la ladera de matorrales con un suave descenso en diagonal campo a través. Esta travesía nos permite esquivar la cima norte y alcanzar su cresta NO. Seguimos bajando por la misma junto los cortados, hasta encontrar el Pas del Manjo (13.35 h, 1507 m).  Este paso permite acceder a una canal oblicua que es el único punto débil de la muralla que cae sobre la collada de Trumfo, que alcanzamos poco después (13.43 h, 1462 m).

Desde la collada el Tossal de Gallinova se ve imponente, inaccesible y con un ascenso poco claro. Un ancho paredón ocupa buena parte doscientos metros de desnivel que nos separan de la cima. La ruta de ascenso va por la izquierda (NO), ascendiendo en diagonal bajo los muros rocosos, por una empinada ladera de pedreras y roquedos. Tras un breve alto iniciamos la subida. Hay varias sendas-huellas de paso. Seguimos una que va bastante alta, que está balizada con hitos. Sin darnos cuenta, aumentamos la cadencia del paso. De repente noto un amago de calambre en mi pierna izquierda... Nos detenemos para masajear y relajar el músculo. El dolor desaparece pero quedo tocado. Seguimos adelante…

No tardamos en cruzar la base de una primera canal que sube en oblicuo a la derecha (NE). Una huella de paso que asciende por el centro de la misma nos hace pensar en una ruta directa a la cima. Decidimos probar  (13.59 h, 1516 m). Con mas pena que gloria, ganamos una treintena de metros de desnivel por un terreno pendiente, pedregoso e inestable. La subida finaliza en una banda rocosa de unos 4-5 metros de alto (1549 m). No parece muy difícil (II+ o III grado de dificultad), ni queda expuesta. Pero tiene su miga ya que, aunque no es muy vertical, hay poco donde agarrarse. Pruebo a subir en adherencia. Al momento mi pierna protesta y he de bajar. Vuelvo a intentarlo por otro lugar con el mismo resultado. Encarna quiere probarlo pero le digo que no vale la pena. En caso de salvar el muro, necesitaríamos una cuerda (que no llevamos) para izar a Pot. Además, podrían haber mas pasos complicados. Y no estoy para aventurillas… Así que nos damos la vuelta, bajamos por la canal y retomamos el sendero. Son las 14.26 h. La intentona nos ha costado cerca de media hora y un dispendio inútil de fuerzas que seguramente nos pasará factura. A veces somos muy pardillos…

Tras dejar atrás esta primera canal oblicua, la senda sigue flanqueando. No tarda en bajar brevemente para después subir un sencillo tramo rocoso. Tras el mismo bajamos unos pocos metros hasta una canal empinada y de piedrecillas que podemos cruzar o no. En cualquier caso, hemos de girar a la derecha para ascender por la misma (paso clave). Durante un breve tramo la pendiente es fuerte y el terreno inestable. Después todo se suaviza. Entramos en una amplia ladera de inclinación moderada que cuelga sobre los cortados que hay a nuestra derecha (S), que intuimos pero no vemos. La senda asciende (E) en diagonal por este costarrón, paralela al cordal-cresta de la montaña que queda a nuestra izquierda y unos metros por encima.

Nuestra andadura nos lleva, primero por una pedrera, después por pasillos pedregosos entre los matorrales. Me cuesta mucho subir. Continuamente he de parar y relajar los aductores que están muy tocados. La situación se complica cuando la pierna “buena” se suma a la fiesta y me sacude con otro amago de calambre. Vaya día … No tenemos mas remedio que detenernos. Estamos a un centenar de metros de la cima y el terreno es sencillo. Pero tal como estoy no lo veo claro. Por un momento me planteo darme la vuelta. Pero enseguida alejo la idea de la cabeza. Es pronto, el día es bueno, no queda mucho... Hay que seguir. Poco importa si batimos el record de lentitud de ascenso a esta montaña…

Tras un cuarto de hora de descanso terapéutico reanudamos la ascensión (14.59 h). A ritmo de caracol, pero con menos paradas que antes, vamos ganando cota. Pronto el trazado de la senda (que de por si no es único) se divide (15.05, 1615 m). Un ramal va a la izquierda (N), en busca del cordal-cresta en el que hay un potente cercado. Preferimos seguir la senda que va por la ladera. En su parte mas alta hay algún breve y fácil tramo rocoso. Finalmente alcanzamos el cordal-cresta (15.17 h, 1660 m). A nuestra derecha (S) tenemos el embudo de salida de la canal por la intentamos subir. La verdad es que desde aquí no se ve nada mal…

El siguiente “problema” es la cercado que recorre la totalidad del cordal-cesta. Hemos leído que hay un paso que lo salva, pero debe estar mas abajo (el desvío de la senda que no quisimos seguir…).  La valla es alto y robusta (la han puesto para evitar el paso de los animales de la reserva de caza de Boumort). Pero hay varios sitios en los que la han levantado por debajo y, agachándose un poco, puede rebasarse. Por uno de esos pasamos al otro lado. Seguimos subiendo por la ladera de la vertiente norte, por un terreno amable de hierba y bojes,  sin apartarnos demasiado de la verja. Tras un breve sector muy poco pendiente, alcanzamos el poste geodésico de la cima del Tossal de Gallinova (15.25 h, 1687 m). Hacia tiempo que nos las pasaba tan putas, pero ha valido la pena…

Hasta su inclusión en el listado ampliado de los Cent Cims, el Tossal de Gallinova era una cumbre muy poco conocida y mucho menos visitada. Se encuentra en el extremo occidental de la larguísima Serra de Carreu, que desde aquí presenta una estampa magnífica. No se de nadie que la haya recorrido íntegramente, y no me extraña…

La estancia en la cima  tiene un efecto curativo. Además de masajearme e intentar relajar las calandracas, nos dedicamos a comer, beber, descansar, contemplar y fotografiar el paisaje que no voy a describir (ver las fotografías adjuntas). Después de 40 minutos de relajación me siento recuperado de mis lacras físicas y preparado para el retorno. Así que Iniciamos la bajada (16.05 h). Con la única variante de seguir el cordal-cresta hasta encontrar el famoso paso de la valla (bastante estrecho por cierto), volvemos a la collada del Trumfo por la ruta de subida (16.47 h). Hemos ido poco a poco pero no ha habido problemas.

Sin detenernos continuamos chino chano por la pista que baja al E-NE (pendiente y pedregosa, no apta para turismos). Esta traza una larga diagonal descendente y, tras 1.2 Km, muere en otra pista mucho mejor que viene de Abella de la Conca (17.05 h, 1250 m). Hasta aquí se acostumbra a venir en coche para subir al Tossal de Gallinova.

Continuamos descendiendo por la nueva calzada (SO). Un poco mas abajo, un sendero bien marcado, nos permite atajar una gran lazada pasando junto la casa de Can Toa. De nuevo en la pista pasamos junto las ruinas de la casa Sarró donde hacemos un breve alto (17.28 h, 1100 m). Seguimos caminando sin prisas por la calzada, haciendo algunos altos para contemplar la Serra de Carreu y el Tossal de Gallinova iluminados con el sol de tarde. Después de tantas horas de ejercer de explorador, la caminata por la pista, lejos de parecernos pesada, tiene un efecto balsámico.

Los últimos metros de la pista son en fuerte subida. Un final acorde con lo que ha sido la excursión. Entramos en Abella de la Conca, atravesamos el pueblo y llegamos al coche (18.10 h). Final…

A pesar de que la excursión nos ha costado bastante mas de lo que pensábamos, nos ha gustado mucho y ha estado muy bien. Tanto que nos planteamos volver para repetirla con alguna variante. Esperemos que la experiencia sirva de algo y podamos realizarla en mejores condiciones y con mejor horario que hoy. ¿Alguien quiere apuntarse…?

FOTOGRAFIAS
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EniEn - Abril 2015